jueves, 9 de junio de 2011

Danilo Medina y el Fondo Monetario Internacional

8/6/2011
“Nuestros miedos son más numerosos que nuestros peligros, por eso sufrimos mas en nuestra imaginación que en lo realidad”
Seneca
Cuando Danilo Medina se alejó del gobierno de Leonel Fernández en el 2008, lo hizo por algo más que por lanzar su propia candidatura presidencial. Esta postura está acompañada de algunos elementos que normalmente los medios no destacan. De entrada se cae de la mata que existían diferencias con la manera en que se estaba manejando la política del Estado. No hay que ser de la oposición para tener pareceres diferentes.

El mismo hombre que le dirigió la campaña a Leonel Fernández más de una vez, dejó claro que tenía otras estrategias para cumplir con la misión del partido con el fin de sacar adelante a la República Dominicana. Después de esto Fernández ganó las primarias y nuevamente la presidencia de la República. Danilo se dedicó a fortalecer su próxima candidatura (en todo su apogeo en este momento) pero no regresó al gobierno. Estos hechos sacan a Danilo de responsabilidades, por lo bueno y por lo malo que en los gobiernos de Leonel Fernández pudiera ocurrir a partir del 2008. Eso obviamente incluye el nuevo paquete de medidas impositivas, que a pesar de lo antes dicho, igual afecta la candidatura de Medina por ser una situación que se da en el gobierno del Partido de la Liberación Dominicana, pero que podría ocurrir a cualquier gobierno, en cualquier país. Ya sabemos de las negociaciones y acuerdos en los que se involucró Hipólito Mejía con el FMI entre el año 2000 y el 2004. Los resultados son harto conocidos.

Al equipo de campaña de Danilo Medina le tocará ampliar su agenda para incluir explicaciones objetivas sobre una imposición que en el futuro cercano beneficiará a la República Dominicana ya que le permitirá la liberación de los bonos soberanos y una situación muy buena para adquirir futuros créditos. Según Alejandro Santos, uno de los negociadores del fondo, el paquete impositivo tendrá que aplicarse por dos razones fundamentales que dañaron los planes de la economía dominicana: El alza del petróleo y los subsidios al sector eléctrico. Esperemos que las cosas sean entendidas y procesadas con la madurez que ya debíamos tener a raíz de malas experiencias en el pasado de Latinoamérica, como el lunes sangriento y luctuoso de abril del 1984, después de una firma y unas imposiciones de este organismo crediticio internacional al gobierno de Salvador Jorge Blanco y el PRD.

Cuando se trata de préstamos, a cualquier nivel, los prestamistas se valdrán de recursos de antemano conocidos, pero las consecuencias por la deshonra de este pueden ser devastadoras, por ejemplo, el caso de los prestamistas tiburones, famosos en el proceso de desarrollo del capitalismo americano por cobrar utilizando sicarios que le molían a golpes o le baleaban. Otros, y de esto si saben los norteamericanos después de la crisis hipotecaria, perdieron sus casas, automóviles y negocios. En el presente reciente aparecieron los listas negras de créditos (Data crédito), que te bloquean las posibilidades de conseguir un empleo. El fondo es un prestamista que suma todas las penalidades anteriores y la aplica a toda una nación. Pero no se puede vivir sin el fondo ya que ellos son los prestamistas del desarrollo que consiguen su opulencia con las penurias del mundo en vía de desarrollo.

El balance de la política económica de las gestiones de Leonel Fernández tiene mucho más luces que sombras. A él le tocó disparar una dinámica de crecimiento, solvencia y aceleración de la economía que es necesaria para mantener al estado en constante productividad y al soberano accionando para mejorar su calidad de vida.

Email: opinión-publica@live.com
Autor: Héctor (Tito) Pereyra

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