Puntos de vista 9 Agosto 2011
SONDEO
Luis Encarnación Pimentel
encar-medios@hotmail.com
Pese a algunas exclusiones notorio en el almuerzo en casa del senador y algún rostro recogido, quizá no advertido por el candidato, a Danilo Medina le fue bien el sábado en mi natal San José de Ocoa, a donde acudió puntual a instalar el comando de campaña en la provincia.
De entrada, el hombre se encontró con un local abarrotado de simpatizantes y con una concurrencia en las afueras que dificultaba el acceso. Con gorras moradas en sus cabezas y afiches de Medina en sus manos, vimos a compueblanos reconocidos que en algún momento militaron en otros partidos, como el caso de un pariente nuestro de cierta edad que toda su vida había sido reformista.
En ese tenor, pudo ser una falla el que los organizadores locales no recogieran los nombres de dirigentes de asociaciones de productores, de comerciantes y de representativos de diversos sectores presentes en el acto, para que el maestro de ceremonia resaltara la importancia de su asistencia y del respaldo de los mismos a la candidatura de Danilo. Desde escasos metros, advertimos a un Danilo Medina seguro y muy confiado en sí mismo, que sabe en lo que está y hacia adónde va.
Al día con todos los puntos en crisis, el hombre enfatiza en el tema de la pobreza, que para él no es nuevo, proclamando a viva voz que tiene las respuestas. Da importancia a la obra de gobierno del presidente Leonel Fernández, de cuya magnitud dice: “El PLD puede andar con su frente en alto”, sin sentir vergüenza ni temor. Danilo fue portavoz en Ocoa de la importancia que el jefe de Estado le ha conferido al contacto directo con la gente de los barrios, a iniciarse este lunes en Gualey, y las soluciones inmediatas que de allí pudieran derivarse a problemas y necesidades puntuales de la población menos pudiente (cuando se mencionó por primera vez el nombre del Presidente, la ovación fue cerrada en el lugar del encuentro, síntoma de que, pese a disgustos y con todo y el natural desgaste, el político Leonel Fernández no ha perdido el encanto, como algunos creen o como otros alimentan de manera mediática).
Un dato. En Ocoa fue donde Danilo inició el “sazón” que le puso a la campaña, al decir que Hipólito “es un hombre en cuya cabeza no hay ideas ni está preparado para dirigir un Estado de manera responsable”.
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