19/8/2011
“Ahora le toca a el ser la punta del iceberg, y todo indica que va rumbo a coronar en las elecciones de mayo del 2012; pero no puede olvidar lo que le pensó a Peña Gómez en las elecciones del 1996 con el antibalaguerismo, porque los balagueristas de hoy son los indecisos que en las encuestas dicen que no están conforme con lo que está pasando en el país y los perredeistas, tan dominicanos como nosotros los peledeistas, que rechazan el PPHchismo y que un candidato que oculta su nombre lo represente”
Seguimos con la importancia de elegir o seleccionar correctamente los temas y los conceptos de campaña, porque desconocerlos equivaldría a un suicidio político. Errar en una selección adecuada significa lo mismo. Ignorar – lo que más se parece a la política es el arte de la guerra, nos decía el maestro – las tácticas y las estrategias tiene la misma connotación. Pero si usted tiene alguna duda, pregúnteselo a Vladimir Llyinch Lenin, el de la revolución Volchevique del 1917, el mismo del tren alemán que lo llevo a Petrogrado y el de la consigna de pan, tierra,…, algo así.
Recién estuve revisando o releyendo el tomo II, editado en el 1998, de una colección de discursos del presidente Leonel Fernández, titulado temas de campana – estuvo presente Don Juan en su estreno - el cual fue realizado en el mes de abrir de ese año, en el salón Juan Francisco García del Conservatorio Nacional de Música. Y en el encontramos las siguientes afirmaciones: “Con tantos elementos adversos, ¿cómo fue posible que el Partido de la Liberación dominicana, ganara las elecciones? No fue magia ni fue suerte. El resultado de una combinación de factores históricos, que lo hicieron posible combinados con una estrategia electoral que finalmente hizo viable ese proyecto”
Luego entra a considerar el tema del trujillismo y el anti trujillismo, en el marco del escenario político que se dio en el periodo 1961-1962. Y dice, refiriéndose a Don Juan, quien fue que resulto victorioso en ese proceso, lo siguiente: “Su tesis fundamental era que desaparecido Trujillo, el fenómeno del trujillismo, no podía reproducirse en el país, y que por consiguiente, hacer una campana electoral alrededor de la figura de Trujillo, no tenía ningún sentido”.
Algo similar paso con el Balaguerismo y su líder que no participó en las elecciones del 1996, el no pactar con ese caudal de votos necesario hubiese sido un grave error. Y ahora hay que reconocer que en todo eso estuvo la astucia y la magia, si así gustan designar, de quien en un bajo perfil movía los hilos de todos esos acuerdos.
Recordemos que en el 1995 el compañero Danilo Medina, dejo la dirección del bufete de diputados para coordinar la campaña del compañero Leonel – el junto al equipo que lo acompañó fueron los arquitectos del primer triunfo presidencial del PLD en mayo del 1996 – y lo que queremos destacar aquí es que fue la sustancia de esas citas anteriores lo que preparó el terreno para lo que luego ocurriría en una segunda vuelta inimaginable para un PRD y un entusiasmo valido de Peña Gómez. Pero ya todos sabemos que al final la realidad supero el entusiasmo y la ilusión.
En aquel entonces la mala imagen del balaguerismo en los sectores de “avanzada revolucionarias” era tan pesada, en el 1995 y 1996, que era imposible, a pesar de los resultados positivos de la táctica y tema de campaña que explica y valida la cita del libro a que hacemos referencias, que en mismo clímax de aquel escenario histórico, donde el PLD coronó en mayo del 1996, el propio presidente y compañero Leonel Fernández no estuvo preparado para asumir consciente y en solitario lo que produjo el desenlace final.
Supimos – historia casi confirmada – que fueron dos ex cónsules de New York, dirigentes históricos del PLD, José Fernández y Bienvenido Pérez, más el actual vocero del compañero Danilo en New York, Ing. Emiliano Pérez Espinosa, quienes se aproximaron al compañero Leonel - la reunión se produjo en su biblioteca- y le aconsejaron sobre la necesidad de conversar de inmediato con el que tenía las chivas amarradas en la Máximo Gómez. Hablamos de finales de mayo y principio de junio del 1996.
No está de más decir que un tiempito después, Leonel siendo presidente, esos mismos compañeros – meras coincidencias – juntos al compañero Danilo Medina, Miguel Coco, Hatuey De Camps, Rafael Lantigua del PRD y …fueron los de la famosa e histórica cita de Peña Gómez y Juan Bosch, en el hospital Memorial Sloan-Kettering Cancer Center, en New York.
Volviendo al tema, supimos que el compañero Leonel mostro resistencia a esta propuesta, por las razones que ya explicamos, y muy a pesar de que se había aceptado el atraer el caudal electoral del Balaguerismo como un tema de campaña. Sin embargo, para sorpresa de los proponentes, al día siguiente y muy tempranito en la mañana, ya estaba el compañero Leonel en la antesala del señor de las chivas de la Máximo Gómez. El resto es historia ya consabida; pero es bueno destacar, que en todo esto sí estuvo detrás y al frente el master de la estrategia en el PLD, el compañero Danilo Medina.
Hay que reconocer que fue el, Danilo Medina, quien dejo su liderazgo y poder político que tenía al frente de la cámara de diputados en el 1995, para dirigir una campaña que todos sabemos lucia difícil de ganar para no decir imposible, como el mismo presidente y compañero Leonel Fernández reconoció en la presentación de su libro a que hacíamos referencia aquí. Y es de justicia admitir, insisto, que la abstracción táctica-política que se reseña en ese libro, lo involucra y lo conecta consecuentemente como una pieza clave, genial e intelectual de lo que sucedió al final de esa jornada. , porque él era el jefe de esa campaña
Ahora le toca a el ser la punta del iceberg, y todo indica que va rumbo a coronar en las elecciones de mayo del 2012; pero no puede olvidar lo que le pensó a Peña Gómez en las elecciones del 1996 con el antibalaguerismo, porque los balagueristas de hoy son los indecisos que en las encuestas dicen que no están conforme con lo que está pasando en el país y los perredeistas, tan dominicanos como nosotros los peledeistas, que rechazan el PPHchismo y que un candidato que oculta su nombre lo represente.
Como podemos ver el método para descifrar la realidad o escenario político de hoy deberá ser el mismo empleado en el 1961-1962, las del 1996 y en el 2004,…, las diferencias siempre fueron los escenarios, y en el caso de mayo del 2012, hay que agregar que no serán los compañeros Leonel ni el inmenso los candidatos, sino aquel joven que al igual que Simón Bolívar y Miranda en Venezuela, dirigió la campaña admirable del 1996.
Autor: Félix Rodríguez
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