| diariolibre.com | 08-09-2010
Danilo Medina va a cumplir el propósito de no confrontar al presidente Leonel Fernández, y parece que es el más convencido de todos los peledeístas, incluyendo los demás aspirantes, de que la reelección no va.
No ha tirado hasta ahora la primera piedra, y camina por lugares de tierra llana y cultivada y predica un evangelio de la no violencia que lo convierte más en Gandhi o en King que en candidato.
Han querido halarlo para lo hondo, con preguntas que son propias del momento, pero incómodas e impertinentes, y ha sabido vadear esas aguas como un práctico de corrientes alteradas. No debe olvidarse que la reelección siempre anda a caballo y no lo cambia en medio del río. Medina o anda a pie o es hombre de nado corto.
Sin embargo, parece que esa situación va a cambiar. Los otros se han dado cuenta de que con ese ñeñeñé está corriendo solo y les lleva adelante más de una jornada. No se conocen las razones más íntimas, pero hay un nuevo ánimo a partir de la noche del lunes, y sus potenciales adversarios decidieron Dar Caza al Octubre Rojo.
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